top of page
Foto del escritorTony Salgado

Segundo Premio Nobel: Bernardo Houssay (III de VIII)

Tony Salgado

 


El doctor Bernardo Alberto Houssay es una figura emblemática en la historia de la ciencia y la medicina.

Su contribución a la endocrinología y la fisiología no solo le valió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1947, sino que también lo estableció como un pionero en la investigación científica en América Latina.

Este artículo explora su vida, sus descubrimientos más significativos y el legado que dejó en el campo de la ciencia.

 

Primeros Años y Formación

Bernardo Houssay nació el 10 de abril de 1887 en Buenos Aires, Argentina.

Desde joven, mostró una gran inclinación por las ciencias naturales.

A los 13 años ingresó a la Escuela de Farmacia de la Universidad de Buenos Aires, y a los 17, ya se encontraba estudiando medicina.

En 1911, se graduó como médico y comenzó su carrera académica y de investigación, inicialmente como ayudante en el Laboratorio de Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires.


Carrera Académica y Científica

A lo largo de su carrera, Houssay se desempeñó en diversas instituciones académicas y de investigación.

En 1913, fue nombrado profesor titular de fisiología en la Facultad de Ciencias Veterinarias. Posteriormente, en 1919, se convirtió en director del Instituto de Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, posición que mantuvo hasta 1943.

Su carrera científica se caracterizó por una intensa actividad investigadora. Houssay fue un prolífico autor, escribiendo numerosos artículos científicos y libros.

Su enfoque principal fue la fisiología endocrina, área en la que realizó sus contribuciones más importantes.



Descubrimientos y Contribuciones Científicas

El trabajo más destacado de Houssay se centró en el estudio de la hormona pituitaria y su relación con la regulación del metabolismo de los carbohidratos.

Sus investigaciones demostraron que la hipófisis (o glándula pituitaria) juega un papel crucial en el metabolismo de la glucosa, especialmente en la diabetes.

Antes de los descubrimientos de Houssay, la función de la glándula pituitaria en la regulación del azúcar en la sangre no estaba completamente entendida.

Houssay y su equipo realizaron experimentos en perros, extirpando su glándula pituitaria y observando los efectos en el metabolismo de la glucosa.

Descubrieron que la ausencia de la glándula provocaba síntomas similares a los de la diabetes, lo que los llevó a concluir que la hipófisis secretaba una sustancia que regulaba el nivel de azúcar en la sangre.

Esta investigación fue revolucionaria porque abrió nuevas vías para el tratamiento de la diabetes y otros trastornos metabólicos.

En reconocimiento a este trabajo, Houssay fue galardonado con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1947, compartido con los fisiólogos Carl y Gerty Cori, quienes también hicieron importantes contribuciones al estudio del metabolismo de los carbohidratos.


El Exilio y la Creación del Instituto de Biología y Medicina Experimental

En 1943, durante el gobierno militar de facto en Argentina, Houssay fue destituido de su cargo en la Universidad de Buenos Aires debido a sus opiniones políticas.

Este evento marcó un punto crucial en su vida y carrera.

Sin embargo, lejos de desalentarlo, Houssay aprovechó esta oportunidad para fundar el Instituto de Biología y Medicina Experimental (IBYME) en 1944, junto con un grupo de colaboradores y estudiantes.

El IBYME se convirtió en un centro de excelencia en investigación biológica y médica, y continúa siendo una institución líder en su campo hasta el día de hoy.

Bajo la dirección de Houssay, el instituto llevó a cabo investigaciones innovadoras en endocrinología, fisiología y bioquímica.

Su enfoque multidisciplinario y su énfasis en la formación de jóvenes científicos contribuyeron significativamente al desarrollo de la ciencia en Argentina y en toda América Latina.


Impacto y Legado

El impacto de Bernardo Houssay en la ciencia y la medicina trasciende sus propios descubrimientos.

Fue un ferviente defensor de la importancia de la investigación científica y la educación.

A lo largo de su vida, trabajó incansablemente para mejorar las condiciones de investigación en Argentina y promover la colaboración internacional.

Houssay jugó un papel fundamental en la creación del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en 1958, una institución clave para el desarrollo científico en Argentina.

Su visión era que el progreso científico y tecnológico era esencial para el desarrollo económico y social del país.

El legado de Houssay también se refleja en la cantidad de científicos y médicos que formó a lo largo de su carrera.

Muchos de sus estudiantes y colaboradores continuaron su trabajo y se convirtieron en destacados investigadores en sus propios derechos, perpetuando la influencia de Houssay en la ciencia mundial.


Reconocimientos y Honores

A lo largo de su vida, Bernardo Houssay recibió numerosos reconocimientos y honores por sus contribuciones a la ciencia.

Además del Premio Nobel, fue galardonado con la Legión de Honor de Francia y la Orden de la Corona de Italia.

Fue miembro de numerosas academias y sociedades científicas, incluidas la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos y la Royal Society de Londres.

En Argentina, su legado es honrado de diversas maneras.

Varias instituciones llevan su nombre, incluidas escuelas, hospitales y centros de investigación.

En 1957, el gobierno argentino emitió un sello postal en su honor, y en 1967, el Banco Central de la República Argentina emitió un billete de 10.000 pesos con su imagen.

Bernardo Houssay es, sin duda, una de las figuras más importantes en la historia de la ciencia en América Latina.

Su vida y obra son testimonio de la importancia de la investigación científica y de cómo el conocimiento puede transformar vidas y sociedades.

Houssay no solo hizo descubrimientos fundamentales en el campo de la fisiología endocrina, sino que también fue un líder y mentor que inspiró a generaciones de científicos.

Su visión de una ciencia abierta y colaborativa, su dedicación a la educación y su compromiso con el desarrollo de la investigación en su país natal son aspectos que continúan siendo relevantes hoy en día.

El legado de Houssay sigue vivo en las instituciones que ayudó a crear y en los muchos científicos que continúan su trabajo.

Su historia nos recuerda que la ciencia no tiene fronteras y que la búsqueda del conocimiento es una misión noble que puede tener un impacto profundo y duradero en el mundo.



Como conclusión del artículo, es evidente que el doctor Bernardo Houssay fue un verdadero pionero en la investigación científica, cuyas contribuciones siguen siendo fundamentales en la fisiología y la medicina modernas.

Su vida y obra son un ejemplo de dedicación, pasión y excelencia, y su legado perdurará en la historia de la ciencia mundial.

Como argentinos, nos debemos sentir muy orgullosos de los logros de nuestro compatriota, y es especial de su constancia a pesar de las dificultades que tuvo que atravesar por no compartir el pensamiento del gobierno de facto de turno, hecho que se mantuvo hasta 1955.

Adicionalmente, la mención de la creación del Conicet y su impacto en el desarrollo científico y tecnológico desde 1958, debe ser un motivo de reflexión para nuestros gobernantes de turno, quienes solo pregonan una visión financiera y cortoplacista.

  

Tony Salgado

 

0 comentarios

Comments


bottom of page