Hola, espero que te encuentres bien, estimado lector.
Te presento este artículo de una serie que te propongo abordar durante los próximos meses, escrita con mucho cariño y con el afán de que te mantengas actualizado sobre las nuevas Tecnologías de Información que ya están golpeando nuestras puertas y que no podemos ni debemos ignorar, si queremos asegurar nuestras fuentes de trabajo en el futuro inmediato.
Espero que sea de tu agrado y te espero al final de la lectura.
Tecnologías digitales y productividad
Cepal, 2022
El crecimiento de la productividad es el motor central del crecimiento económico sostenido. Así, a largo plazo, incrementar la productividad es la única forma de mantener el crecimiento del ingreso y el acceso a bienes y servicios esenciales.
Desde la primera revolución industrial, la introducción de nuevas tecnologías contribuyó a mejorar la productividad de las empresas y de la economía como un todo.
En una primera aproximación, el progreso técnico es la base del crecimiento de la productividad.
Por ello, el desarrollo y la incorporación de nuevas tecnologías en los procesos productivos es esencial para el crecimiento.
El índice de madurez o preparación tecnológica mide la agilidad con la que una economía adopta las tecnologías existentes para mejorar la productividad de sus industrias, con énfasis en su capacidad para aprovechar las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en las actividades diarias y los procesos de producción para una mayor eficiencia y competitividad.
La adopción rentable de las nuevas tecnologías depende de las capacidades y de las dotaciones de factores de las empresas y los países.
La estructura productiva, la intensidad tecnológica en la industria y la dinámica de las empresas son clave para explotar todo el potencial de las tecnologías digitales.
Dados la estructura y el limitado nivel de sofisticación tecnológica del sector productivo y la estructura empresarial en los países de América Latina y el Caribe, no es suficiente impulsar y facilitar la adopción de tecnologías.
Potenciar el ecosistema digital requiere de políticas estructurales que apoyen la sofisticación tecnológica, la innovación y la productividad.
Si bien el impacto de las tecnologías digitales sobre la productividad está condicionado por la estructura productiva y por las características estructurales de las empresas, la transformación digital genera importantes cambios en la organización de las empresas y las dinámicas de mercado.
Los cambios disruptivos en las empresas y su entorno derivados de los avances de la digitalización se han acelerado recientemente con la pandemia de COVID-19 y la mayor utilización de las tecnologías digitales como respuesta a esa situación.
La adopción de tecnologías digitales se ha vuelto aún más prioritaria para dinamizar la productividad y el empleo de calidad.
Son muchos los posibles impactos del cambio técnico y existe una fuerte correlación positiva entre la intensidad tecnológica de la estructura productiva y la productividad de la economía; a nivel microeconómico, la transformación digital incide en la productividad y el crecimiento mediante mecanismos que mejoran la eficiencia y la eficacia de las empresas.
Más allá de los impactos directos sobre los negocios, la digitalización produce importantes cambios en la dinámica competitiva de la cadena de valor y en los consumidores.
Los nuevos modelos de negocio están dando lugar a una creciente participación de nuevos jugadores “nativos digitales” que traen consigo múltiples implicancias para la dinámica de mercado y la economía en general.
En algunos sectores, como en el comercio, se observa una competencia directa entre la oferta tradicional y la disrupción digital.
El mayor protagonismo de los canales digitales puede llevar al desplazamiento de los jugadores y los canales tradicionales y a la necesidad de que estos últimos se adapten, desarrollen sus propios canales digitales y se integren en plataformas digitales de otros jugadores.
En algunas actividades, el nivel de disrupción digital puede llegar al punto de que la digitalización se vuelve una cuestión de supervivencia dadas las exigencias del “nuevo consumidor”, como por ejemplo en la intermediación de servicios de turismo, particularmente en el contexto de la pandemia.
La digitalización de los procesos permite optimizar las operaciones de negocios mediante la reducción de costos y las mejoras en la eficiencia de la atención al cliente mediante chatbots y mejora en la toma de decisiones.
El uso de datos a escala y de algoritmos de analítica avanzada permiten optimizar la toma de decisiones y aumentar la rentabilidad para optimizar el puntaje de los de los créditos.
Los canales digitales y el uso de herramientas de comercialización y suministros digitales permiten expandir la cartera de consumidores y mejorar la captación de clientes, aumentar el acceso a proveedores y optimizar la cadena de suministro para captar nuevos clientes en redes sociales.
La virtualización de bienes y servicios, y la digitalización de la entrega de productos fomentan nuevos modelos de negocio que permiten reducir riesgos y aumentar las ganancias a través de aplicaciones digitales.
El turismo es uno de los principales motores de la actividad y el empleo en la región, particularmente en Centroamérica, el Caribe y México.
Dada la naturaleza de sus servicios, ha sido una de las actividades más restringidas y que ha sufrido mayor impacto como resultado de la pandemia.
La implementación de estrictos protocolos sanitarios —principalmente mediante la combinación de testeos, aislamiento, medidas de desinfección y uso de equipo protector— junto con restricciones al uso de la capacidad de los locales y el distanciamiento han permitido reiniciar parte de las actividades en la mayoría de los países de la región.
Sin embargo, aún falta mucho para recuperar los niveles de dinamismo previos a la pandemia.
Incluso cuando se cuente con una vacuna, se espera que muchos de los cambios actuales continúen afectando al sector. Por ello, es fundamental su transición hacia una “nueva realidad”.
La transformación digital puede acelerar esa transición.
En primer lugar, las plataformas digitales permiten desarrollar alternativas “sin contacto” para mitigar los efectos sobre el núcleo del negocio.
Por ejemplo, muchos museos en la región han desarrollado experiencias “ciento por ciento virtuales” que permiten visitar los espacios y las muestras e interactuar a distancia con ellos.
Sin embargo, esas alternativas han sido solo sustitutos limitados e insuficientes para contener los efectos negativos sobre el modelo de negocio tradicional.
Más allá de desarrollar versiones digitalizadas, muchos actores están creando o expandiendo modelos de negocio mediante tecnologías digitales con mayor foco en la población local.
Por ejemplo, muchos hoteles han aprovechado el auge de las entregas para ofrecer servicio de comida a domicilio, en algunos casos creando nuevas experiencias exclusivas de alta cocina en el hogar.
Algunas aerolíneas han impulsado servicios de mensajería para compras internacionales puerta a puerta.
Las organizaciones locales de turismo han creado plataformas de comercio electrónico para permitir a los negocios y restaurantes locales continuar brindando algunos servicios.
La transformación digital también puede fomentar la recuperación de la actividad tradicional.
Por ejemplo, el uso de aplicaciones de trazabilidad permite optimizar los tiempos de confinamiento y asegurar una rápida respuesta ante potenciales contagios.
La aerolínea Etihad Airways de los Emiratos Árabes Unidos trabajó con Elenium, un proveedor de soluciones de automatización, para cambiar la operación de registro con el fin de optimizar tiempos, brindar mayor comodidad y minimizar el riesgo de contagio.
Ese desarrollo combina el registro de datos biométricos del pasajero a través del celular, el uso de sensores y algoritmos de inteligencia artificial para reconocer el equipaje y evitar el uso de etiquetas, y terminales de autoservicio que facilitan el registro, despachan equipaje y ofrecen compras personalizadas.
Las herramientas digitales también permiten gestionar algunos impactos de la crisis. La cadena de hoteles Barceló está combinando el reconocimiento de voz con algoritmos predictivos para detectar qué clientes tienen mayor probabilidad de cancelar sus reservas y cuál es su nivel de satisfacción, para optimizar la gestión de la capacidad y brindar una mejor atención.
La transformación digital puede llevar a la consolidación de valor y a la mayor concentración de beneficios por intensificación de “economías de alcance” y de dinámicas de superestrella o de “el ganador se lleva todo” (winner takes all).
La combinación de estos factores, junto con los cambios en los hábitos de los consumidores (preferencia por canales digitales y velocidad de entrega) lleva al auge de las plataformas digitales.
Por otra parte, la transformación digital genera también un acercamiento y una optimización de la cadena de suministro mediante la reducción de los costos de transacción, de distribución y de comercialización.
Este proceso trae consigo un aumento de la desintermediación de la cadena y de la relevancia de canales de venta directa, como en el caso del turismo.
Finalmente, en algunos sectores la digitalización genera una transferencia de valor hacia los consumidores que se materializa en mayores excedentes del consumidor por reducción de precios, mayor transparencia y menores costos de búsqueda.
Un ejemplo es la digitalización de la industria de la música, en la que el 96% de las ganancias de la tecnología habría ido a los consumidores.
La coexistencia entre mecanismos de creación de valor y dinámicas de transferencia provoca que, a nivel macro, no siempre se observe una relación positiva y significativa entre la digitalización y el crecimiento de la productividad, particularmente en períodos de transición y disrupción.
En este contexto, la región tiene una ventana de oportunidad para implementar las reformas estructurales necesarias y adecuar su marco regulatorio con el fin de definir dónde ubicarse en las trayectorias tecnoeconómicas hacia las que se dirige el mundo.
En la era de la transformación digital, las actividades públicas y privadas buscan aprovechar la revolución en la eficiencia originada por el uso y el manejo de grandes volúmenes de datos, y beneficiarse así de las nuevas economías de alcance y escala.
Las nuevas tecnologías de la Industria 4.0 permiten accionar cambios en los procesos productivos de las economías emergentes para conseguir ganancias en productividad y competitividad que sean sostenibles en el tiempo.
Entre las tecnologías disruptivas que pueden impulsar la productividad, hay ocho que destacan por su potencial aplicabilidad en las cadenas de valor estratégicas de América Latina y Caribe.
• Analítica avanzada e inteligencia artificial •
El uso de algoritmos y de máquinas de alto poder computacional permite la identificación de patrones y el análisis predictivo para facilitar el aprendizaje y la toma de decisiones de forma automatizada.
Generalmente supone la combinación de metodologías de analítica tradicionales (como regresiones, algoritmos de búsqueda u optimización lineal) con técnicas de aprendizaje automático, que emplean métodos como los algoritmos de agrupamiento (clustering), la reducción de dimensionalidad, las redes de aprendizaje profundo y las redes neuronales.
Para 2023, se espera que la analítica avanzada represente un mercado de más de 270.000 millones de dólares a nivel global.
• Internet de las cosas •
El uso de sensores y actuadores permite utilizar dispositivos o productos inteligentes e interconectados, accesibles o rastreables en forma remota.
La Internet de las cosas (IoT) permite desarrollar “redes inteligentes” para automatizar o mejorar la efectividad de los procesos de producción y distribución, particularmente cuando interactúa con tecnologías como la analítica avanzada.
Las principales aplicaciones de la Internet de las cosas se dan en las ciudades inteligentes (smart cities), en la industria inteligente, en la telemedicina y en los hogares inteligentes.
En 2018, Amazon lanzó Amazon Go, un concepto de supermercado ciento por ciento automatizado donde los consumidores pueden hacer las compras sin necesidad de interactuar con ninguna persona ni de Tecnologías digitales para un nuevo futuro pagar en el local.
Tecnologías como la visión por computadora, el aprendizaje profundo y las redes de sensores permiten identificar a los consumidores y los productos que llevan, así como cobrarles de forma automática y totalmente digital al terminar su visita.
• Robótica avanzada •
Los avances en la inteligencia artificial, en la visión por computadora, en los sensores, en los motores y en la hidráulica permiten que los robots realicen tareas cada vez más complejas, con patrones menos repetitivos y predecibles.
La robótica industrial, por ejemplo, representó un mercado de 12.000 millones de dólares en 2016 y se espera que su tasa de crecimiento anual entre 2016 y 2023 sea del 4,4%.
Se observa un particular dinamismo en materia de robots de servicio.
Por ejemplo, la venta de robots de logística se incrementó un 110% entre 2018 y 2019, mientras que la de robots médicos aumentó un 28% en el mismo período.
• Servicios en la nube y plataformas digitales •
Las plataformas digitales o virtuales son espacios en Internet que facilitan la ejecución de aplicaciones o programas en un mismo lugar para satisfacer distintas necesidades.
La mayor parte de las interacciones digitales ocurren de forma remota en la nube, lo que reduce la necesidad de almacenamiento y de procesamiento en los computadores y los dispositivos locales.
La computación en la nube permite obtener servicios de computación a través de una red que reduce los costos de utilización y facilita la transmisión de información.
Para 2023 se espera que estos servicios representen un mercado de más de 350.000 millones de dólares a nivel mundial.
• Cadena de bloques •
Una cadena de bloques actúa como un libro digital que trabaja con un registro único, consensuado y descentralizado para validar información y transacciones.
El registro se distribuye en varios nodos de una red y en cada bloque se almacena una cantidad de registros o de transacciones válidas, así como información referente a ese bloque y a su vinculación con el bloque anterior y con el siguiente a través de una huella digital única.
A medida que se crean nuevos registros, primero son verificados y validados por los nodos de la red, y luego se añaden a un nuevo bloque que se enlaza a la cadena.
Además, si esa información se guarda cifrada, se puede garantizar su confidencialidad, ya que solo quien cuente con la clave de cifrado puede acceder a ella.
Esto permitiría, por ejemplo, unificar registros de salud de forma segura y conveniente, como la historia médica de cada paciente.
La industria farmacéutica podría utilizar esta tecnología para verificar medicamentos y evitar falsificaciones.
Por su parte, las criptomonedas pueden considerarse un libro contable donde se registra cada transacción.
• Navegación autónoma y semiautónoma •
Comprende los vehículos maniobrados sin intervención humana o con una intervención reducida.
Incluye tanto automóviles, trenes y camiones como drones pilotados por un operador.
Los drones pueden utilizarse en diferentes tipos de proyectos, como investigación submarina, búsqueda de naufragios y operaciones de salvamento.
Se usan muy especialmente en las instalaciones alejadas de la costa (offshore) para complementar las inspecciones que requiere el casco de los buques.
Las aeronaves no tripuladas se han utilizado sobre todo para llevar objetos a lugares alejados y en zonas de desastres, ya que tienen la ventaja de poder llegar y realizar entregas a lugares apartados.
Amazon se está preparando para entregar pedidos en menos de 30 minutos desde la compra a una distancia máxima de 16 kilómetros desde el almacén de la compañía mediante una flota de drones.
• Impresión 3D •
Pertenece a la familia de técnicas conocidas como manufactura aditiva.
Los procesos aditivos permiten construir objetos mediante la creación y consolidación de capas, a diferencia de las técnicas de moldeo o sustractivas.
El desarrollo de máquinas con capacidad de imprimir objetos ha capturado de forma creciente la atención en los últimos años.
Sin embargo, aún hay dudas acerca de su verdadero potencial.
Mientras que algunos entusiastas consideran que es una nueva revolución industrial, muchos otros tienen una visión más escéptica y consideran las limitaciones de la tecnología y los niveles de adopción, que aún son bajos.
Más allá de esto, la impresión 3D tiene aún un importante potencial de aceleración tanto en términos de manufactura directa de productos y piezas como en la elaboración de herramientas y moldes, por ejemplo, de implantes médicos personalizados.
Con el fin de lograr la osteointegración, los fabricantes usan impresión 3D para controlar con precisión la porosidad de la superficie, y así simular mejor la estructura ósea real.
• Realidad virtual y realidad aumentada •
El uso de tecnologías inmersivas como la realidad virtual y la realidad aumentada permite reinventar la forma de crear y de experimentar contenido.
Por ejemplo, en el Centro de Simulación Neuroquirúrgica y Realidad Virtual de la Universidad de Stanford se utiliza la realidad virtual para planificar en detalle las cirugías de cerebro complejas (por ejemplo, para la extracción de tumores) a partir de simulaciones que se crean a partir de la información obtenida de tomografías computadas.
El uso de tecnologías inmersivas tiene múltiples impactos para los negocios, como la reducción de costos de producción mediante prototipos virtuales y la reducción de barreras a la entrada para nuevos creadores de contenido.
Las nuevas tecnologías se pueden utilizar en todas las etapas de la operación de diferentes sectores y actividades.
Son fuentes de valor específicas para las empresas y los negocios que requieren una clara articulación de las necesidades de negocio y del impacto de la solución, y una visión clara sobre cómo utilizar la solución que se va a incorporar.
El potencial de estas tecnologías no es común en todas las actividades económicas; depende de cada sector, de su grado de sofisticación y de articulación con otras actividades, de la incorporación de tecnología y de las capacidades y habilidades de sus trabajadores, así como del contexto donde operan las empresas y los negocios.
La adopción de nuevas tecnologías implica una reconfiguración de toda la cadena productiva, con la definición de nuevos eslabones, servicios y empresas, lo que abre oportunidades para la diversificación sectorial y para el desarrollo de habilidades.
Hola, te estaba aguardando para dejarte mis comentarios.
El advenimiento de la tecnología digital es un hecho incuestionable y, mas temprano que tarde, habrá de llegar plenamente a nuestro país. Ello implicará un dramático cambio en nuestros comportamientos sociales a nivel personal y laboral.
Diversas actividades y procesos que existen actualmente desaparecerán y serán reemplazados por otros nuevos mucho más eficientes y que requerirán una menor participación del sápiens.
Aun tenemos tiempo para prepararnos, en especial la gente joven que está haciendo sus primeras experiencias laborales o que está estudiando en la universidad. Es fundamental hacerlo cuanto antes para no quedar expuestos a la repentina desaparición de sus fututas fuentes de ingresos.
Las distintas disciplinas mencionadas en el artículo: economía, salud, industrias y gobierno, entre otras, serán alcanzadas, tarde o temprano, por este impacto si nuestro país no quiere quedar descolgado del resto del mundo, aun más de lo que ya está actualmente. Debemos familiarizarnos, por lo tanto, con los Macrodatos (MD), la Inteligencia Artificial (IA), la Internet de las Cosas (IoT), la Robótica y la Computación Cuántica (CC), entre otros conceptos clave que serán moneda corriente dentro de un muchos años.
Durante los próximos cuatro meses Trazando Surcos será el Portal donde podrás interiorizarte más en detalle de cada uno de estos nuevos campos del saber humano.
Ahora me gustaría conocer tu honesta opinión con respecto a este artículo.
Gracias por tu colaboración.
Comentários